Exfolia tu piel mínimo una vez por semana si quieres tener el rostro más luminoso y natural. La exfoliación estimula la circulación sanguínea y elimina las células muertas que con el paso de los días se van acumulando en la primera capa de la piel, opacándola y asfixiándola.
No necesitas comprar productos costosos, usa los que tienes en tu cocina. Aquí te recomendamos algunos:
Limón y Azúcar: Mezcla 1 cucharada de azúcar con 1 de limón, aplícala en la piel previamente limpia, masajea por 15 min y lava con agua fría. El limón es un astringente natural que ayuda a eliminar la grasa de la piel. El azúcar remueve la grasa y las células muertas.
Miel y Canela: Mezcla 1 cuchara de canela y 2 de miel, aplícala en el rostro, masajea por 15 minutos y lava con agua fría. Estos dos ingredientes son ideales para las pieles con acné. Las propiedades antimicrobianas de la canela evitan la proliferación de bacterias, y la miel es considerada un antibiótico natural, lo cual ayuda a disminuir el enrojecimiento y suavizar la piel.
Sal y Agua: Mezcla 1 cuchara de sal y 2 de agua, aplícala en el rostro, masajea por 15 minutos y lava con agua fría. La sal produce un efecto détox natural, ya que absorbe las toxinas que originan el acné y devuelve a la piel los minerales que vamos perdiendo durante el día, como el potasio y el sodio. El agua hidrata, elimina las toxinas y mejora la elasticidad de la piel.
Recuerda no excederte, ya que exfoliar tu piel en exceso aumenta la sensibilidad... No olvides que para tener una piel luminosa y sana, no puedes olvidarte de incluir en tu rutina facial tu Kit de Roller y Gua Sha ;)